Hace poco he tenido acceso a la correspondencia de una dama que vivia en el numero 197 del Boulevar Auguste Reyers, de Bruselas.
Es muy interesante, porque en los ultimos anos 40 la visitaban amigos de los Estados Unidos que se desplazaban en barco desde Nueva Jersey hasta Amberes durante un trayecto de 8 dias, frecuentaba una escuela de ballet clasico y era muy aficionada al teatro.
Pasaba sus vacaciones en el Gran Hotel de Cannes, que lucia este maravilloso aspecto hasta su incomprensible remodelacion en los anos 60. Algo parecido a lo que le paso al Kursaal de San Sebastian - que era muy bonito hasta que a algun genio se le ocurrio contratar a Moneo con dinero del contribuyente para que plantase sus pretenciosos "cubos".
Todo esto me lleva a la conclusion de que la post-guerra en Bélgica no parece que fuera muy dura; lo que a su vez me lleva a la conclusion de que la ocupacion alemana tampoco debio serlo.
Otra cosa debe decirse de la Gran Guerra de 1914 a 1918.
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